21 enero 2012

FRAGA, ESE HOMBRE


Respetar a los muertos es una tradición muy arraigada en nuestras tierras gallegas y este gato es respetuoso, hasta con los ratones; desde la mayor consideración y el respeto hacia las ideas intentaré con esta entrada hablar de Manuel Fraga Iribarne alejado de falsas biografías.
Fraga en Palomeras...?
Fraga aún después de muerto, sigue levantando pasiones encontradas. Detractores y partidarios casi a partes iguales y sus valoraciones distan unas de otras como la noche del día.
A nadie debe extrañar que la prensa, sobre todo determinados medios, hagan aparecer al difunto Manuel Fraga Iribarne, como el dicho, “limpio de polvo y paja” y por ende, a nadie extrañara que aquellos lucharon y luchan por la igualdad entre los hombres y entre los géneros; por una sociedad democrática, nos acordemos de Manuel Fraga Iribarne sentado junto a Franco en el Consejo de Ministros mientras en España muchas gentes luchaban por la libertad y para construir una sociedad más justa.
Posiblemente, aún hoy puede que existan gentes que no consideren el régimen franquista opresor y nunca condenaron la dictadura, Fraga Iribarne fue uno de ellos, es natural y lógico, como natural es cambiar de ideas y dar la batalla por ellas.
Fraga y Fidel Castro
La trayectoria política de Manuel Fraga es larga y dilatada; hay quien dice que nació en un coche oficial, debido a los cargos de relevancia política que ocupó en la dictadura y en el periodo democrático. No hay duda que genera admiración y también odios, amigos y enemigos; su cercanía al dictador era conocida, y para él no supuso, baldón alguno, puede que fuera motivo de orgullo y hasta de honra, por tal razón, es de sentido común entender que nunca condenara el franquismo.
Spain is diferent, Manuel Fraga, también; sesenta años de plena dedicación a la política dan para mucho, incluso para defender la democracia. Su innegable inteligencia le permite pasar de la dictadura a la democracia, participar en la redacción de la Constitución, no votarla y por increíble que parezca, defenderla. Aquel, en otro tiempo, duro falangista, acepta la legalización del Partido Comunista y trabajar por la democracia...
Fraga y Franco
Manuel Fraga, is diferent, nacía a la par que las revoluciones de los proletarios, (en 1923) según los “papeles” en Villalba, Lugo, España, y si hacemos caso a otros, vio la luz en el mismo lugar donde nació Fidel Castro, Birán, Holguin, Cuba, de ahí la amistad entre ambos que al parecen ya la mantenían sus pprogenitores, emigrantes gallegos y ricos terratenientes azucareros del lugar.

A Dios lo que es de Dios y al Cesar, lo que es del Cesar; Manuel Fraga, el primogénito de una familia de doce hijos, retornó Galicia y aprovechándose de la escasa memoria de los gallegos que hasta por olvidar, se olvidaron de los recientes sucesos de Vitoria y Montejurra, los más oscuros de su sombria etapa política. Con la ayuda de los “centristas” gallegos vio como se abría paso una larga etapa de Presidente de la Xunta de Galicia.
Fraga y Franco
No hay duda, Fraga supo medrar en todos los ambientes en los que valía la pena gracias a su inteligencia y habilidad, y es justo reconocer los grandes cambios que se operaron en su trayectoria política; no es fácil transformarse en un “reformista” aliado con exministros de Franco y mucho menos dar la cara por una carta magna que ni tan siquiera voto. Hay que recorrer un largo camino tras haber sido de procurador en Cortes y Consejero Nacional del Movimiento, si se quiere crear un partido con opciones reales de Gobierno; Manuel Fraga Iribarne lo logró.
Es justo reconocerle su capacidad de trabajo y también los notorios avances en la transformación de la autonomía de Galicia pero no por ello es admisible que haya quienes quieran ocultar las partes oscuras de su pasado no tan lejano.
Injusticias hay muchas y gentes dispuestas a luchar contra ellas, pero no todas, ni para todos, son iguales y/o comparable a la injusticia que genera la riqueza mal distribuida ante una clase enriquecida por el trabajo esclavo, y a Manuel Fraga Iribarne nunca se le vio combatirla, Manuel Fraga dedico la mitad de su vida politica al servicio del Movimiento y no se entiende el porque, hay quienes quieren enterrar las imágenes de aquellos tiempos.
Estas líneas no quieren ser objeto de polémica, son respetuosas con los muertos como no podría ser de otra forma; con todos los muertos.
Manuel Fraga Iribarne, gallego universal merece descansar en paz.